Iberdrola avanza en el desarrollo de un nuevo parque eólico marino en Alemania, para el cual ya se han designado las turbinas, de 9,5 MW. Vestas será el encargado de suministrar los 50 aerogeneradores.
El nuevo parque, bautizado como Baltic Eagle, abre nuevas expectativas de negocio para Navantia y Windar Renovables, que conforman desde hace cuatro años una alianza estable en este sector. Ambas firmas ya han desarrollado dos proyectos para la eólica de origen vasco: en el 2015 fabricaron 29 jackets para el parque de Wikinger, mientras que en el 2017 empezaron la obra para otras 42 para el recinto británico de East Anglia One.
Hace solo unos pocos días que Iberdrola abrió la licitación para la adquisición de las 50 cimentaciones, que en esta ocasión serán monopiles. Es un tipo de sujeción que no ha fabricado aún Navantia, no así Windar, que ya ha ejecutado varios proyectos de ese tipo en sus instalaciones asturianas.
El parque de Baltic Eagle que tendrá 476 MW de potencia, estará ubicado a 75 kilómetros de la costa de la isla de Rügen, ocupando una superficie de 40 kilómetros cuadrados.
Los nuevos molinos de viento serán ya un 35 % más potentes que los que generan energía desde el primer parque alemán de la compañía, el de Wikinger, consolidando una apuesta por colocar máquinas más capaces, que sirvan también para abaratar el coste de la energía de la eólica marina.