El parque eólico marino, East Anglia One, que Iberdrola está construyendo en el Mar del Norte británico y que cuando en 2020 entre en funcionamiento, se convertirá en el segundo mayor del mundo con una potencia de 714 megavatios (MW).
La construcción del parque, que supone el mayor proyecto de energía renovable de una empresa española con una inversión récord de 2.500 millones de libras (unos 2.800 millones de euros), ha entrado en su fase final con el inicio este fin de semana del montaje de los los 102 aerogeneradores, fabricados por Siemens Gamesa, y que estarán situados a unos 50 kilómetros de la costa inglesa de Suffolk.
La instalación de las turbinas, de 7MW cada una, se prolongará hasta abril del año que viene, momento en el que se iniciará la fase de puesta en marcha, con la conexión de las máquinas, para acabar produciendo y suministrando energía limpia a la red eléctrica británica para más de 630.000 hogares.
El núcleo central del parque, la subestación marina Andalucía II que se encargará de recoger y transformar la electricidad producida por los aerogeneradores, se encuentra también en su fase final de montaje. La instalación ha sido fabricada por la empresa naval española Navantia en los astilleros de Puerto Real en Cádiz. Otra compañía española, la asturiana Windar, también ha participado en el proyecto.