Navantia está cada vez más cerca de conseguir la adjudicación del concurso FSS –Fleet Solid Support– para la fabricación de dos Buques de Aprovisionamiento de Combate (BAC) –con opción a un tercero– para la Armada británica tras la retirada de dos de los cinco competidores del mismo, Daewoo y Fincatieri, y la posibilidad de que un tercero, el Team UK, les siga.
Según informó el diario económico Financial Times, el motivo de esta decisión radicaría en uno de los requisitos reflejados en los pliegos del contrato, que establece que serán los propios astilleros los que deberán adelantar una parte de la financiación del proyecto. Este punto concreto facilitaría las cosas a aquellas compañía de titularidad pública –en este caso Navantia y la Japan Marine United Corporation–, aunque tampoco debería suponer un problema para la Unión Temporal de Empresas (UTE) Team UK –dado el potencial económico conjunto de BAE Systems, Bab-cock, Cammel Laird y Rolls Roy-ce–, lo que podría indicar otros motivos.